Cristina presentó en Casa Rosada la puesta en marcha de compensaciones para impulsar la producción porcina en el país, que por tal motivo tendría una reducción en los precios para los consumidores.
Al presentar el plan, la Presidente dijo que el Gobierno, a través de la ONCCA, "va a subisidiar parte del forraje, lo que va a permitir que el precio de los cortes porcinos lleguen más baratos a la gente".
Tras el anuncio formal, deslizó un pedido de perdón a la industria bovina y disparó entonces: “No se olviden, comer cerdo es muy bueno porque tiene grasas mejores que las de los bovinos y mejora la actividad sexual”. Y ante la risotada del auditorio, soltó: “Probar no cuesta nada”.
Cristina sorprendió al considerar que es mejor "comerse un cerdito a la parrilla" que recurrir al "viagra" y recordó que el fin de semana comió un "cerdito riquísimo" de la provincia de Córdoba y luego - con un tono pícaro - remató que "anduvo todo bien" con su marido Néstor Kirchner.
"Yo soy fanática de la carne de cerdo y no lo digo por quedar bien, ni por hacerme propaganda, ni nada", prosiguió la mandataria, y de inmediato agregó entre risas: "Kirchner me mata cuando llegue a Olivos".
Fuente: Crítica
