"El ejercito argentino, que educa a mucha gente en la formación militar, se ve obligado a desprenderse de ella después de algunos años. Entonces muchas de esas personas van a pasar a nuestro sistema policial y carcelario", adelantó a Télam el funcionario.
Según Garay, "se trata de gente muy bien entrenada que deberá tomar conocimiento de todo lo que constituye la ética colectiva y las normas que protegen a esa ética". (Télam)