Durante la batahola, un periodista de Radio Nacional resultó golpeado por seguidores de Jorge Rafael Videla.
En las imágenes difundidas por canales de televisión se ve a un hombre, que la agrupación HIJOS identificó como Alberto Aprea, allegado al represor Luciano Benjamín Menéndez, cuando le da unos golpes con la mano abierta al periodista Aldo Blanco, reveló Cadena 3.
El abogado Claudio Orosz relató que "cuando se retiraba el juez Garzón", tras presenciar parte de la audiencia de hoy del juicio, "dos familiares de los represores, aparentemente, empezaron a insultarlo".
La policía redujo rápidamente al agresor, pero minutos después estaba ubicado de nuevo dentro de la sala de audiencias para presenciar la segunda parte de esta jornada de juicio.
"El magistrado español ingresó esta mañana a la sala, luego de sostener breves encuentros con el gobernador Juan Schiaretti y representantes de organismos de derechos humanos locales.
Garzón había arribado a Córdoba pasadas las 8,15 de hoy, en un vuelo oficial que también integraron el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde, y otros funcionarios.
Además, en un encuentro privado con autoridades de organismos de derechos humanos, estos le entregaron un documento en el que le expresaron su respaldo ante la suspensión de la que fue objeto, cuando decidió investigar los crímenes cometidos durante el régimen franquista, pese a que existe una ley de amnistía que lo impide.
Durante la mañana prestó declaración el legislador Asbert, detenido en 1975, quien relató que antes de ingresar como preso "legalizado" a la Unidad Penitenciaria número 1 (UP1) de Córdoba, pasó por el Departamento de Informaciones (D2) de la Policía provincial, también en la capital.
“Estábamos en el D2, con capucha, las manos atadas en la espalda. No nos permitían siquiera tomar agua. Todavía zumban en mis oídos algunas palabras… una mujer dijo “este no coge más” en relación al estado en que estaban mis genitales después de la picana… no puedo identificar quién era”.
“En la UP 1 eramos víctimas de una golpiza constante; digo constante porque entre golpiza y golpiza no pasaban más de 2 horas. En una de esas golpizas es golpeado en la cabeza Pablo Balustra. A causa de eso, queda tirado en el piso con una mano extendida en alto, con movimientos convulsivos. El impacto del golpe sobre la cabeza de Pablo fue brutal. Cayó en el acto. Inmediatamente advertí que lo de Pablo era grave. Cayó como un muñeco".
"Lo arrastramos de los brazos y de los cabellos junto con fantini, alessandro (no recuerdo sus nombres) y florencio díaz… aún hoy me pregunto si con eso no contribuímos en el desenlace fatal, cuando en realidad lo que queríamos era salvarle la vida. Pablo estuvo dos días tirado en una cama, no le funcionaba la mitad del cuerpo. A los dos días de pedir ayuda a los guardias, Pablo fue llevado a la enfermería".
Balustra es uno de los 31 presos políticos que fue asesinado en 1976 en supuestos intentos de fuga.
El Tribunal Oral Federal número 1 de Córdoba juzga a los represores por los crímenes cometidos en la UP1 de esta capital, que funciónó como centro clandestino de represión.
El legislador recordó que fue torturado en distintas partes del cuerpo y también en sus genitales, por lo que, recordó, escuchó que una mujer que se encontraba en el lugar dijo "este no coge más".
Entre los acusados figura una ex miembro del D2, Mirta Antón, pero el testigo no precisó si ella había sido quien hizo el comentario.
Asbert también recordó que el preso político Pablo Balustra, asesinado en un simulacro de fuga, estaba hemipléjico cuando murió durante una sesión de tortura perpetrada por un oficial militar que no pudo identificar.
