La ciudad es un juego de obstáculos

Esta es la historia de A.P.Y.Fa.Di.M

Como comienza A.P.Y.Fa.Di.M?

Surge hace 7 años, por la necesidad de un grupo de padres que teníamos hijos con este problema y nos encontramos solos en la provincia, por lo que comenzamos a pensar que institución iba a contener esta patología, porque fundamentalmente ellos tienen problemas motores, es decir que no pueden caminar.


Todas las ONG’S o instituciones de esa época únicamente contenían a chicos con problemas mentales, asi que nos organizamos y decidimos conformar un espacio a donde los chicos pudiesen pasar su tiempo libre, desarrollar sus actividades y estar contenidos por gente que pasa por la misma situación que ellos.


Es así  que nos conformamos, en un primer momento, solo con tres padres más y decidimos formar esta ONG el 5 de diciembre del 2000

Cuantos integrantes tiene actualmente?

A.P.Y.Fa.Di.M cuenta con una comisión directiva que es la que rige la asociación y tenemos 36 niños jóvenes y adultos con discapacidades motoras.

Cuál es el objetivo que persigue esta asociación?

Desde un principio, nuestro objetivo tiene que ver con la eliminación de barreras arquitectónicas en el medio, pues cuando comenzamos, los chicos no tenían forma de movilizarse en la ciudad, incluyendo escuelas, cine, shopping, e incluso no podían utilizar los sanitarios públicos en casi todos los lugares. Es por eso que buscamos la igualdad de oportunidades, que puedan aprovechar su tiempo libre y mostrar a la sociedad que ellos desde una silla de ruedas son capaces de hacer muchas cosas.  


Desde que inicia la ONG hasta hoy, que cosas cambiaron en referencia a las barreras arquitectónicas?

Es relativo, porque cuando nosotros comenzamos no existía nada de lo que hay ahora, por ejemplo las rampas en las esquinas, y aunque hoy contamos con esto nos representa un problema porque no las puede utilizar la persona sola, debido a la inclinación de las mismas. Esa pendiente impide que la silla de ruedas pueda bajar bien, y se corre el riego de que se atore y la persona se caiga. De la misma manera, hay un desnivel entre el asfalto y la vereda, por lo que quedan atoradas las ruedas, y necesitan SI O SI de otra persona para que los ayude... las cosas se hicieron pero se hicieron mal y tan solo el que está sentado en una silla de ruedas lo puede entender.


Que lucha se plantea respecto a este tema a la hora de hacer vales los derechos de los discapacitados motores?


Y bueno, es una larga lucha ... por ejemplo en la terminal hemos trabajado para que adapten los baños, las salas de cine, para que haya un lugar para poner silla de ruedas y un ascensor. Y si bien es cierto que el ascensor se puso hace unos meses no tiene las medidas necesarias para que entre un acompañante o para que gire la silla para poder salir.


A que considera que se debe la falta de compromiso o conocimiento por parte de las autoridades y la sociedad?

Creo que hay mucha improvisación, no solo del concesionario del inmueble u oficina pública, sino de quienes tienen la obligación de hacer cumplir la ley, porque estamos hablando de que existen una ley y ordenanzas municipales a donde se establecen las medidas mínimas obligatorias y sin embargo quien tiene que habilitar eso lo hace sin que se cumpla la misma (por la ley) que ya tiene 11 años de vigencia y sin embargo siguen habilitándose locales comerciales con gradas o con accesos difíciles.


Con respecto a las políticas de salud, Ud. considera que son eficientes a la hora de trabajar con los discapacitados motores?

Nosotros hicimos un intento de contención de salud, porque esta es una patología compleja que no es atendida en la provincia, por lo que los pacientes son derivados a Córdoba y Buenos Aires.


Es por eso que comenzamos a gestionar para traer a un  profesional a la provincia pero las obras sociales no nos acompañan, sobre todo OSEP que prefiere pagarle al mismo profesional que nosotros traemos pero derivando el paciente a Córdoba, con todos los gastos que esto implica (pasajes y estadía de paciente y acompañante, además de la atención del paciente)


Actualmente se realiza alguna campaña de concientización a cerca de los derechos de los discapacitados motores?

En realizad comenzamos intentando hacer campañas mediante panfletos que distribuimos de muchas formas, sobre todo enfatizando en el respeto hacia la dignidad de la persona, pues lo que pareciera ser tonto para el común de la gente es muy importante para ellos como ser estacionarse en una rampa destinada para discapacitados motores.


Creo que necesitaríamos hacer mucho mas campaña pero los fondos no nos alcanzan, y si bien subsistimos gracias a una cuota societaria y proyectos que presentamos que se van acordando vía nación y provincia, son muchos los gastos que se generan como ser el transporte, los viajes entre otras cosas.



De qué forma contienen a los integrantes de A.P.Y.Fa.Di.M?


{adr}Nosotros nos reunimos mensualmente, allí cada papa cuenta sus experiencias, pasa por poder compartir de igual a igual. Además los chicos mas grandes contienen a los más pequeños y juntos formamos una gran familia que se entiende y se apoya en cualquier problema que pueda surgir.


Ud. como madre, como siente que ve la sociedad a los discapacitados motores?

Hemos planteado la situación de que los chicos que están entrando a la adolescencia comiencen a integrarse a lo que son los grupos de pares de jóvenes, y comenzar a concurrir a los bares, cyber, etc ... el tema es que la sociedad es hostil con estos chicos.


Notros queremos que ellos hagan valer sus derechos porque les corresponden, pero a la vez tenemos que luchar para que no sean resentidos, porque si ir a dar un paseo, que es algo placentero, te resulta una odisea, ¿cómo se hace para luchar para que el adolescente con esta problemática no sea resentido?


Buscamos que sean felices, que disfruten de lo que la vida les da, pues ellos tienen mucho positivismo y ganas de pelearle a la vida, pero el medio es tan duro que a veces hace que esa lucha se resienta.



Es necesario reflexionar acerca de los padecimientos que sufren estas personas, a las que salir a pasear no les resulta tan fácil y además tienen que lidiar con la hostilidad de la sociedad.
Comencemos a pensar en un cambio radical, que no solo tenga que ver con cuestiones arquitectónicas, sino con un cambio desde adentro, desde lo social y que involucre a todos. Porque las barreras también las ponemos nosotros cuando no respetamos a nuestro prójimo y esas son las más difíciles de sortear.