Este aumento se debería a que el virus de la gripe circula en la mayor parte del año en los países de clima subtropical, al que la Argentina está tendiendo por el cambio climático.
Así las cosas, los especialistas santiagueños apuntan a que se avecina una temporada de virulencia virósica que debe ser tomada en cuenta.
Para el médico pediatra Carlos Carabajal, el tema más importante de la temporada es la posibilidad de una epidemia gripal, “tan importante como los accidentes de tránsito de lo que a veces hacemos poco”, según manifiesta.
Por su parte, el médico gerontólogo Carlos Ferreres presupone que puede haber aumento de casos en adultos mayores santiagueños, mientras que el médico neumonólogo Raúl Divi aseguró que se observa una mayor cantidad de afecciones relacionadas con anginas bacterianas y rinofaringitis.
Coincidentemente, los tres especialistas aconsejan la vacunación como medida de prevención.
El sitio testigo referencial de los casos es el Centro Provincial de Salud Infantil (Cepsi), en donde en las últimas semanas se incrementaron las consultas, anticipándose un aumento paulatino de requerimientos por cuadros bronquiales obstructivos.
Sostiene el Dr. Carabajal que “parece ser que se nos adelantó el otoño porque estamos con clima otoñal en pleno verano con la aparición de algunos casos de infecciones virales de las vías respiratorias”.
Como anticipo, informó que este año se están produciendo más casos de catarros de vía aérea y anginas con relación a la misma época del año pasado, “lo que nos alerta que puede tratarse de una temporada con casos aumentados con respecto al año pasado y si le agregamos que cambiaron las cepas, va a haber un alto porcentaje de la población sensible enfermarse de esos virus”.
El Dr. Carabajal sostiene que las epidemias se producen a medida que aumenta la cantidad de personas sensibles.
Certificó el profesional que en lo que va del año “empezaron a aparecer más casos de influenza con relación al año pasado”, añadiendo que esta época del año se encuentra afectada por cinco o seis grupos de virus, algunos con más afinidad por el otoño.
Asimismo, advirtió que “tenemos un virus que es permanente todo el año y que es endémico: el adenovirus y el rinovrus, en cambio los de la gripe es periódico que actúa en esta época”.
Al respecto, aclara que estos virus producen afecciones que van desde la rinitis a la angina, pasando también por un catarro leve, hasta afecciones severas de la vía respiratoria, estableciendo que por esa causa los grupos de personas más afectadas son los niños pequeños y los ancianos, “y cuanto más pequeño es el niño, más grave es la enfermedad, igual que en los ancianos”.
En lo niños de seis meses para abajo, estos síntomas entran en la categoría de del síndrome bronquial obstructivo que provoca mucha dificultad respiratoria y con riesgo de muerte.
También puede afectar a las personas que padecen de diabetes, afecciones renales y pulmonares, asmáticos, cardiópatas o deficiencias inmunitarias.
Pese a la complejidad del panorama que se presenta, el Dr. Carabajal anuncia que “para este grupo de virus de la gripe contamos con una vacuna, lo que es una posibilidad de prevenir la afección grave de la enfermedad y disminuir los riesgos de infección y de morbimortalidad”.
Las vacunas antigripales gratuitas que entrega el Iosep anualmente, van a estar disponibles a fines de este mes, en los centros de vacunación que se anunciarán oportunamente. También habrá entrega de vacunas por parte del Pami local.
Deben ser vacunados los niños desde los seis meses hasta los tres años de edad, así como los adultos mayores a partir de los 55 años. En todos los casos, es obligatoria.
Los adultos mayores con factores de riesgo como enfermedades pulmonares obstructivas crónicas o diabetes, pueden ser tratados con una vacuna antineumocócica que se aplica cada cinco años o una vez en la vida.
Fuente/ elliberal.com.ar
