San Pedro denominado “El Santo caminador”, su historia que data desde 1.770 desde su existencia en Fiambalá se prepara para visitar a centenares de devotos que no pueden llegar hasta su fiesta de fin de mes.
Lo diversos preparativos en Palo Blanco y zonas aledañas, ponen en manifiesto la fe intacta que aún conservan estos pequeños pueblos, llenos de belleza, tradiciones e historias.
Integrantes de la comisión de esta iglesia, expresaron su contento de poder llevar la imagen del patrono a cada uno de los habitantes para que ellos puedan verlo de cerca, realizar sus plegarias y llenar sus almas de paz y amor. Por otro lado comentaron que ya están abocados en el trabajo de la organización para la fiesta del próximo 29, donde esperan el arribo de miles de personas como cada año.