Los prófugos huyeron anoche, en el momento en que los internos tienen oportunidad de intercambiar entre las diferentes celdas.
Para recuperar la libertad, los reclusos picaron el borde de un plafón de luz que se ubica en la pared y fueron tapando la zona con pasta dentífrica, para que los guardias no pudieran detectar el boquete que estaban realizando.
Con una "T" que consiguieron de una estructura metálica rompieron la pared y, cuando advirtieron que ya tenían el espacio suficiente para escabullirse, Tascón y Díaz sacaron el plafón y se metieron por el hueco que conectaba a un espacio entre dos paredes de unos 35 centímetros de ancho.
Las autoridades creen que hubo un trabajo previo de inteligencia por parte de los reclusos, que accedieron a un área de mantenimiento que conecta directamente con el sector de mantenimiento y electricidad.
Tras sortear caños de agua y cables de energía eléctrica, Tascón y Díaz abrieron una puerta que da al patio, se treparon al alambrado y escaparon.
Dos hombres peligrosos
Díaz había sido detenido tras un intento de robo a mano armada en un restaurante de Comodoro Rivadavia, pero ya tenía otras causas similares.
En tanto, Tascón era reincidente en delitos contra la propiedad y apenas alcanzó a estar detenido 12 horas en la alcaidía, ya que el mismo lunes había recibido tres meses de prisión preventiva; fue luego de ser apresado el domingo al mediodía robando en una casa de La Loma junto a una pareja de adolescentes de 17 y 15 años.
En la alcaidía actualmente purgan condena y proceso unos 62 internos, de los cuales cuatro son mujeres.
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