Pero hasta nueva orden y a partir de este lunes, cada automóvil que circule en el corazón de la capital británica deberá pagar un peaje por valor a cinco libras (7,5 euros o dólares) y aquellos que no respeten la norma serán objeto de una multa de 80 libras (120 dólares).
Más de 800 sofisticadas cámaras, con alcance para leer las chapas patentes de los automóviles y verificar en una base de datos si la tasa ha sido pagada, fueron instaladas en el sector, que ocupa una zona de 20 km2. (Télam-SNI)