Haciendo flamear banderas chilenas y pañuelos blancos, lanzando pétalos de rosas al viento y al son del grito ´Felipe amigo, el pueblo está contigo´, decenas de miles despidieron entre lágrimas al reconocido animador y acompañaron por varias cuadras a la carroza fúnebre que trasladó sus cenizas hasta el cementerio Parque del Recuerdo de Santiago.
A escasísima velocidad, entre aplausos y flores, el cortejo avanzó por las calles aledañas al edificio de Televisión Nacional de Chile (TVN), la casa televisiva de la que Camiroaga era su principal figura y donde trabajó por casi dos décadas.
Al pasar por un mercado de flores cercano, el cortejo recibió el tradicional saludo de los floristas de la ´Pérgola de San Francisco´, que tapizaron la calle con miles de pétalos de rosas que también lanzaron al viento, tal como lo han hecho otras veces en homenaje a los personajes más queridos por el pueblo chileno.
Camiroaga, de 44 años, murió el pasado 2 de septiembre junto a otras 20 personas que viajaban a la isla Robinson Crusoe -en medio del océano Pacífico- en un avión de la Fuerza Aérea de Chile, que tras dos intentos fallidos de aterrizaje, cayó al mar.
El animador viajaba a la isla junto a otros cuatro miembros de su equipo -tres periodistas y un camarógrafo-, para hacer un reportaje sobre las labores de reconstrucción tras el maremoto que azotó al pequeño poblado, en el archipiélago Juan Fernandez, en febrero de 2010.
La muerte lo encontró en un momento culminante de su versátil carrera, en la que se lució como animador, actor y comediante, y que desde casi una década lo mantenía a la cabeza de programa ´Buenos días a todos´, la compañía matinal por años de miles de chilenos.
Durante 2009 y 2010, Camiroaga animó además el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, considerado el evento de música popular más importante de América Latina.
Su despedida se inició temprano, cuando miles de sus seguidores comenzaron a reunirse en las afueras del edificio de TVN, convertido ya en un verdadero santuario, por la gran cantidad de velas, flores, fotos y mensajes dejados aquí en recuerdo de Camiroaga y los otros miembros de su equipo.
La televisora organizó en su honor una sobria ceremonia fúnebre en uno de los patios del edificio del canal, en la que participó la familia del animador, compañeros de trabajo y sus amigos más cercanos.
En la ceremonia, ornamentada especialmente por el diseñador Francisco Camiroaga, hermano de Felipe, participaron dos halcones de propiedad del animador, un reconocido amante de los animales y la naturaleza.
A pocos minutos de iniciada la ceremonia, un grupo de aviones de acrobacia de la Fuerza Aérea de Chile, llamados ´Halcones´, homenajeó por aire al animador, que tenía licencia para pilotear aviones. "Vuela alto, vuela libre, hasta siempre", se escuchó decir desde el cielo.
Al intervenir en la ceremonia, el director ejecutivo del canal, Mauro Valdés, señaló emocionado: "Felipe fue un ser especial y uno de los hombres más influyentes de este país", para luego invitar a escuchar la canción "Ángel para un final", de Silvio Rodríguez, que el propio Camiroaga pidió que sonara el día de sus funerales.
"Se nos llenan los corazones al ver que Felipe fue una parte tan grande de tanta y tanta gente", señaló por su parte su hermana Paola.
La tragedia aérea remeció a Chile justo en un momento de alta efervescencia social, poniendo una abrupta pausa a meses de protestas lideradas por los estudiantes chilenos, cuyo reclamo por una educación gratuita y de calidad fue apoyada por el propio Camiroaga en un mensaje difundido de manera póstuma.
Fuente: 26noticias.com.ar
