Después de casarse hace un año en Francia, Yossi Bensimón, un ex profesor de Economía y Gestión, de 38 años, y su esposa Mani, de 26, pensaron en qué lugar les gustaría criar a sus hijos. La pareja decidió finalmente radicarse en Israel.
"Sin embargo, estábamos bien integrados en Francia. Pero luego comenzaron las agresiones antisemitas. Más que las acciones mismas, lo que nos alertó fue la falta de reacción por parte de los políticos. Teníamos la impresión de haber sido abandonados, de ser ciudadanos de segunda categoría", dice Yossi. (Télam-SNI)