"Nosotros fabricamos un repertorio de ollas con tapas de piedra y de hornos pizzeros siguiendo los diseños que tenían nuestros ancestros, y que no son otra cosa que una muestra de la artesanía regional", dijo a Télam el líder del grupo, Armando Alvarez.
El horno puede funcionar inclusive sobre una hornalla a gas, y una vez que está caliente permite sacar pizzas cada cinco minutos, con un sabor irresistible, "hasta para los porteños, que algo saben de pizzas", se divierte Alvarez. (Télam)