En el acto, se puso en marcha un operativo de emergencia del cual participaron numerosos efectivos policiales, ambulancias, como personal de la División Bomberos de la Policía y del Cuerpo de Bomberos Voluntarios 13 de Octubre de la ciudad capital.
La novedad surgió aparentemente por un “derrame de cloro concentrado, proveniente de un tacho con capacidad para 120 litros, el que habría tomado luego contacto con otro producto”, según informó a la prensa el comisario Gustavo Castillo, jefe de Bomberos de la Policía.
“Luego de la pérdida hubo una combinación de sustancias. Eso generó una situación de inestabilidad y produjo fuertes emanaciones de gases”, detalló el funcionario.
La principal sustancia habría estado almacenada en un negocio de “todo suelto” que se dedicaría a la venta de productos para limpieza, ubicado con dirección a la peatonal Tucumán.
Al expandirse los gases por el aire, varias personas habrían evidenciado diversos síntomas, como “falta de oxígeno y ardor en la garganta”, según explicaron a EL LIBERAL voceros del servicio de urgencias del Sease.
Por esa razón, las ambulancias auxiliaron al menos a seis personas, de distintos sexos y edades.
Rápidamente, se las condujo a la sala de urgencias del Hospital Regional, aparentemente fuera de peligro.
Mientras tanto, efectivos policiales y el personal de vigilancia interna del tradicional centro comercial, dispusieron el inmediato desalojo del predio, a modo de prevención.
Por su parte, los bomberos se tuvieron que colocar barbijos, guantes y camperas para luego dirigirse hacia el lugar del accidente.
Unos 20 minutos después del accidente, los uniformados ya se hallaban levantando –con cuidado– el mencionado tacho, al ordenarse que fuera retirado del mercado.
Se realizó el traslado hasta las escalinatas de la peatonal Tucumán, en donde luego se acercó una camioneta de la División Bomberos, en cuya caja fue depositado el enorme envase, de material plástico.
Seguidamente, el móvil policial partió hacia la base de esa dependencia, en donde el contenido será sometido a las pericias de rigor.
Una vez que pasó el peligro, se desarrolló la urgente limpieza del perímetro afectado por el accidente.
De este modo, se arrojó agua en el piso, a los fines de diluir el componente que había causado la alarma en el Mercado Armonía.
En forma paralela, los guardianes del orden mantuvieron un estricto control por la zona cercana al centro comercial, especialmente, con cortes de calle, siendo liberados únicamente para el paso de ambulancias y de patrulleros.
Fuente/ elliberal.com.ar
