En la edición del domingo de LA GACETA se publicó un informe que habían realizado los miembros de la sala II de la Cámara Penal, Alberto Piedrabuena y Emilio Herrera Molina acerca de la cantidad de internos que estaban a su disposición y que habían consumido drogas antes de entrevistarse con ellos. Cuando el estudio estuvo completo, los camaristas le enviaron copias al ministerio de Seguridad Ciudadana, al Servicio Penitenciario y a la Corte Suprema de Justicia. Pretendían hacer conocer lo que estaba sucediendo a todos los estamentos interesados, pero no obtuvieron respuestas satisfactorias. Roberto Guyot, director de Institutos Penales, advirtió que si pasaba droga a los internos de Villa Urquiza era a través de los propios familiares de los detenidos. Pero los jueces hicieron referencia a la presunta complicidad de guardiacárceles.
Fue la propia secretaría de Prevención de las Adicciones, a cargo de Alfredo Miroli, quien llevó a cabo los estudios en 114 presos, y en 74 de ellos se habían detectado restos de cocaína, de marihuana, de benzodiacepinas y de morfina. En algunos casos habían consumido drogas combinadas. El resto de las salas penales no hicieron informes, pero se descuenta que las cifras se repiten en todos los internos de la cárcel de Villa Urquiza. Antes de publicar la nota, LA GACETA habló con Guyot, quien afirmó que en las mejores cárceles del mundo ingresa droga, y aclaró que permanentemente los miembros del Servicio Penitenciario están siendo capacitados para detectar droga en los controles que se les hacen a las visitas. "Jamás encontramos droga en manos de un guardiacárcel, pero eso no significa que no pueda pasar y por eso estamos atentos. Están todos en la mira", aseveró el funcionario.
Sin embargo, estas explicaciones no fueron suficientes para los jueces federales, quienes pretenden conocer en detalle lo que sucede detrás de los muros. Por eso ordenaron un informe detallado de los controles que se realizan cuando los internos reciben visitas. También pidieron a los representantes de la Dirección General de Drogas Peligrosas de la Policía de la provincia que informen cuántas intervenciones llevan a cabo mensualmente en el penal.
"Este tipo de cosas no pueden pasar, y menos que nosotros nos enteremos por el diario", se quejó una fuente judicial que fue consultada por LA GACETA y que pidió reserva de identidad. "El hecho de que estén detenidos no significa que si cometen un delito no deben ser identificados, o si se sabe quién pasa la droga deba ser sancionado. Estamos hablando de tráfico de estupefacientes", aclaró.
Si bien no se sabe cuándo serán contestados los oficios, se informó que se requirió la máxima celeridad para iniciar la investigación.
Fuente/ lagaceta.com.ar