En el balneario de Palo Blanco, desarrollaron distintos tipos de actividades como así también contaron con distintos tipos de distracciones.
En cambio en el complejo Termal fue todo lo contrario. La mayoría de los jóvenes cuestionaron al área de Cultura del Municipio local por no contar con una planificación de tareas de distracción y recreación y por no permitírseles aunque sea poner música por ser un día especial para todos, con el argumento que molestan a los turistas.
De la misma manera, visitantes de Buenos Aires demostraron su disconformidad con los precios, calidad e higiene del comedor que brinda servicio en el complejo como así también de la polémica “Ley seca” que decretó el Concejo Deliberante de Fiambalá prohibiendo la venta de bebidas alcohólicas para toda persona.
Tomas Duarte, un turista de Capital Federal, nos decía que el junto a su esposa ambos de más de 40 años, habían preparado un asado que deseaban degustarlo con una copa del rico vino de la zona y no se les permitía. Que este tipo de decisiones las autoridades deberían replantearlas si quieren atraer turistas y que además ellos son gente grande responsable que nunca abusarían en más de una copa.
En otro lugar del complejo y por la tarde, se disponían a realizar un baile (que hubiese sido la única distracción del día) y cuando los jóvenes recién estaban llegando las autoridades policiales decidieron cortar tal evento.
El organizador Javier Cáceres, criticó duramente en una radio local a las autoridades Municipales como así también a la Policía local por maltrato y abuso de autoridad, prometiendo iniciar acciones legales correspondientes.
Así es como el día de la Primavera que todos esperan colmado de colores y alegría, se transformó en un día opaco y apagado, con una Ley Seca que dejará mucho de qué hablar. Los comerciantes, propietarios de boliches y empresarios organizadores de eventos bailables, todos enojados por una decisión tomada de manera apresurada sin el tratamiento necesario que al fin terminó demostrando que las medidas tomadas a último momento, nunca tienen un buen y positivo final.