El resto había aparecido de forma fragmentaria y dispersa en diferentes publicaciones con transcripciones dispares, informó la agencia EFE.
Se trata, según explica Fernández Berrocal, de la última obra que Jiménez escribió en 1912, al final de su etapa de retiro en Moguer (la localidad del sur de España en la que nació) entre1905-1912 y que después continuó al conocer a la que sería su esposa, Zenobia Camprubí, en Madrid en 1913.
Fuente: Télam