El derrumbe se produjo en la parte antigua de la Escuela 1312 de la Isla Guaycurú, mientras que el edificio nuevo permanecía intacto, según destacaron autoridades y medios de prensa locales.
En la escuela ya se encontraban suspendidas las clases y sólo funcionaba el comedor, a cargo de la directora y una docente, mientras que el resto del personal del establecimiento ya hacía dos meses que había sido evacuado por el permanente aumento en el nivel de las aguas.
El servicio cubre las necesidades de sólo 20 de los 60 chicos que asisten a la escuela, ya que el resto fue trasladado a la localidad correntina de Santa Lucía.
De acuerdo con lo señalado por la titular de la Región II de Educación del nodo Reconquista, Leonor Peña, "por suerte la parte del edificio nuevo no se ha inundado" como consecuencia de la crecida.
La funcionaria, en declaraciones radiales citadas por el sitio de noticias Datafeonline, se lamentó de que a causa de la emergencia no se puedan iniciar obras en la escuela que ya habían sido licitadas.
"Seguramente va a haber que esperar que el suelo se asiente y baje un poco el río. El trabajo va a ser diferente, porque las aulas van a estar a 1,20 metros, no como la última construcción que se hizo sobre el suelo", sostuvo al respecto.
La sostenida crecida del río Paraná, alimentada por fuertes lluvias durante la primavera en Brasil, provocó evacuaciones de pobladores y de ganado en toda la zona del Litoral, en un llamativo contraste con vastas regiones del país que sufren una persistente sequía y la consiguiente falta de agua, con medidas de racionalización y hasta cortes programados de ese servicio en varias ciudades.
Fuente/ 26noticias.com.ar
