Asimismo, se les explicó a los cooperativistas que una vez que la lombriz termina de trabajar se debe utilizar una técnica minuciosa para atraerlas y poder sacarlas con cuidado de modo que no perjudique el producto para poder después tamizarlo, embolsarlo y comercializarlo. Además se les enseñó a medir la humedad, a como proteger las cunas de factores externos (sapos, moscas, pájaros, etc.), introduciéndolos también básicamente en la comercialización del producto final.
Posteriormente, se realizaron las evaluaciones, a fin de establecer el grado de transferencia de los contenidos dictados y se obtuvo un 80 % de asimilación de cómo se da el proceso y sus cuidados.