La Subdirección de Alumbrado Público informó que, por semana, son destruidos unos cinco artefactos lumínicos en distintos puntos de la ciudad. Para reponerlos, es necesario invertir $ 7.000 semanales, porque cada uno cuesta $ 1.400. En consecuencia, por mes hay que gastar $ 28.000 sólo en este ítem.
Estos números son sólo un ejemplo de los gastos que le originan a la ciudad los actos vandálicos. No te pierdas el informe que LA GACETA publicará mañana en la edición de TUcumanos con más cifras y con la historia de los guardianes de la placita del barrio Oeste I, la contracara de los dañinos.
Fuente: LA GACETA ©