El robo, si bien tomó estado público este miércoles a través de una información periodística, ocurrió hace más de un mes en la Plaza López, una de las más antiguas de la ciudad, donde el carrusel comenzó a girar hace medio siglo aproximadamente.
Tres días después de radicada la denuncia, y cuando a cargo de la calesita se hallaban el dueño y una de sus hijas, llegó una mujer con los dos elefantitos que pidió dinero a cambio de la devolución de los mismos. (Télam)