En el Nacional Buenos Aires todo parecía haber retomado el rumbo de protesta que adoptaron los alumnos hace una semana, cuando resolvieron tomar el colegio en solidaridad con otras escuelas ya que afirman que la reforma curricular que pretende implementar el gobierno porteño generaría una disminución de las orientaciones.
Mientras tanto, en la Iglesia San Ignacio de Loyola se siguen celebrando misas, aunque un olor a humo perdura cerca del altar, luego de que cinco alumnos incendiasen el sillón sacerdotal y algunos bancos del templo.
"Alguna consecuencia debe haber, nada es gratis, pero me parece que expulsarlos es una medida extrema"Estudiante
En diálogo con Télam, tres alumnos del CNBA sostuvieron que "los chicos -que provocaron los destrozos y que por decisión de la asamblea estudiantil no fueron identificados- están muy arrepentidos con lo que pasó", tal como manifestó Ulises, de 2º año, quien aclaró, junto con otras dos compañeras, que sus dichos son personales y no reflejan necesariamente la postura del resto de los alumnos.
Violeta, estudiante de 2º año, opinó que "alguna consecuencia debe haber, porque nada es gratis, pero me parece que expulsarlos es una medida extrema, razón por la cual creemos que primero habría que debatirlo con el rector, los chicos, los padres, y toda la gente que está en el tema".
En relación a la medida de protesta que adoptaron los estudiantes, Lucía, de 2do. año, sostuvo que "creemos que es importante porque la reforma curricular tiene que ser frenada", y agregó que "lo que ocurrió en la iglesia no nos representa como alumnos, ni como centro de estudiantes, ni como movimiento secundario, porque apostamos a la lucha por una mejor educación".
En tanto Gustazo Zorzoli, el rector del CNBA, reiteró hoy que propondrá "la expulsión" de los estudiantes que realizaron los destrozos y aseguró que "para la rectoría aún no están identificados" los responsables.
En un comunicado emitido el día de ayer, el rector había afirmado que "nuestra posición respecto del lamentable hecho" que significó la irrupción y posteriores destrozos en la Iglesia contigua al colegio, es que "es responsabilidad de la toma".
Fuente: Télam