El diario "Maariv" recoge hoy la historia: Danny Shemesh tenía diez años cuando quedó atrapado en un incendio en un trastero de su casa. Su vecina Miriam Diner oyó su llanto desesperado, entró en el cuarto, le tiró encima una trapo mojado y lo sacó a un lugar seguro.
Según DPA, el viernes, Shemesh era el responsable a cargo en la estación central de bomberos en Israel cuando recibió una llamada alertando de un incendio. Por la dirección dada supo que la vida de Miriam y su marido Avraham estaban en peligro.
"La casa estaba llena de humo. Envié un bombero a romper la puerta. Me di cuenta que no había tiempo que perder y rompí la ventana de la habitación. Avraham todavía estaba bien, pero Miriam ya estaba inconsciente. En los segundos finales salté a la habitación y la saqué", relató Shemesh al "Maariv".
"Todos los días salvamos vidas, pero en esta ocasión, gracias a Dios, he tenido el privilegio de salvar la vida de una mujer sin la cual yo no estaría vivo", dijo Shemesh tras visitar el domingo a Miriam en el hospital, donde sigue ingresada en estado grave.