Ante la inmensidad de la pared, Segatori resolvió continuar con el aerosol, única herramienta utilizada en esta composición, y fusionó cuatro obras del gran pintor argentino como "Barco Hundido" y "Hombres trabajando", y agregó mascarones de proa, "objetos de culto", del artista nacido en La Boca.
Además, sumó a la pintura a unos niños en tamaño real mirando a Quinquela, que aparece de perfil y con una espátula. Así llegó en una primera etapa a los 700 metros cuadrados, entre los puentes Bosch y Viejo Pueyrredón.
Fuente: Télam