Cerca de las 7.15, Alvaro Luis Borotti conducía un VW Gol por la ruta 315, unos 13 kilómetros al oeste de esta localidad. Junto con él iba Fermín Emilio Herrán.
Según versiones proporcionadas por la Policía y por testigos, los jóvenes retornaban a alta velocidad desde Alpachiri.
Aún no se logró establecer el motivo por el cual una de las ruedas del VW mordió la banquina. El rodado, fuera de control, empezó a dar tumbos y se estrelló contra un enorme pino.
"Recién estábamos despertándonos. La explosión nos hizo saltar de la cama. Salimos rápido para ver qué había sucedido y nos dimos con que un auto estaba destrozado y casi envolviendo a un árbol. Todo estaba en silencio. Me estremeció la escena", contó Vilma Elena, quien vive a unos siete metros del pino contra el que se estrellaron Borotti y Herrán. Cuando los vecinos fueron a auxiliar a las víctimas, estas ya habían fallecido. "Quedaron atrapados en medio de los hierros retorcidos", remarcó Elena. Los Bomberos Voluntarios trabajaron durante casi una hora para rescatar los cuerpos. El momento de mayor tensión se vivió cuando llegaron los familiares de los fallecidos. La fiscala Juana Juárez ordenó pericias para determinar las causas del accidente.
El director de Transporte de la Provincia, Roberto Viaña, se mostró preocupado por la cantidad de tragedias que se produjeron en las últimas semanas en rutas del sur tucumano. "Creo que la situación es bastante complicada. Más allá de todos los controles que se realizan, va a seguir habiendo tragedias si los conductores no toman conciencia", expresó. Añadió que se secuestran entre 45 y 50 autos cada fin de semana durante controles de alcoholemia.
"La mayoría de los choques que estamos teniendo son, al parecer, por fallas humanas. Es importante que el conductor esté descansado antes de subirse al auto. En este caso de estos jovencitos, tenemos entendido que llevaban una vida sana", aclaró el comisario Carlos Carabajal, segundo jefe de la Regional Sur.
Fuente/ lagaceta.com.ar