Aun así, hoy sigue siendo necesario un espacio de reflexión y acción para pensar y luchar por una Argentina independiente y justa. Un espacio de reflexión y de acción como lo fueron el nacionalismo y FORJA en la década del 30, en un marco doctrinal sólido, para no caer en el minimalismo y profundizar, como dice la Sra. Presidenta Cristina Fernandez de Kirchner, “el debate de ideas”
Ese marco de profundización ideologica puede haber diversas miradas y propuestas “nacionales”, vengan del peronismo, del nacionalismo, del viejo yrigoyenismo, del conservadorimo nacional, del rozismo, del desarrollismo, de la democracia cristiana o del tradicionalismo. El propósito es construir una alternativa al progresismo socialdemócrata y al liberalismo individualista ofreciendo propuestas concretas en el régimen de representación, en el modelo económico, en el problema de la deuda externa, en la política de derechos humanos, en las relaciones con el Primer Mundo, en la moral pública y en la defensa de nuestra identidad cultural.
Para entender qué significó el 17 de octubre, creo que es obligado leer criticamente “El 45″ de Félix Luna que además sirve para comprender la aberración que significó la Revolución Libertadora-Etapa Aramburu. Igualmente es recomendable en este tren de ser un poco más profundos “Operación Masacre” de Rodolfo Walsh, que independientemente de la ideologia del autor, es de indispensable para ahondar en la Argentina actual y en el Peronismo. Todo esto sin dejar de lado la Doctrina Social de la Iglesia, fuente básica de la Doctrina Peronista. Sobre una crítica serena y constructiva de los aciertos y errores del peronismo me parece interesante la reflexión que se puede hacer sobre las obras de Héctor B. Petrocelli, Mario Amadeo y Marcelo Sánchez Sorondo con el fin de iluminar acertadamente nuestro hacer de cada dia.
Parece patente, y por momento patetico, que muchos no entiendan al peronismo tal como tampoco entienden el federalismo, el alsinismo o el yrigoyenismo, o lo que es mas grave, que tampoco entiendan al pueblo. Esto no implica canonizar todas las costumbres populares, pero tampoco demonizarlas “por decreto”. El peronismo es un movimiento que logró poner los cimientos de una restauración genuina de la grandeza nacional, de la justicia social, de la Tradición, de la soberanía y de la independencia. Un movimiento que estableció un socialismo nacional con vocación continentalista y universalista. En el movimiento donde el hombre es en y para la comunidad y esta para el hombre.
El peronismo, tan rico ideologicamente, es y deberá seguir siendo un movimiento popular y caudillista, porque esa es la idiosincracia “política” de la Argentina. Si no queremos que de lo popular se pase al populismo chauvinista es URGENTE e INDELIGABLE a dias de elegir presidente del Movimiento -tanto en el ambito nacional, provincial y municipal-; trabajar por la formación y compromiso de una dirigencia capacitada, virtuosa, critica, honesta, patriota y cristiana que abandonando definitivamente prácticas y liturgias perimidas y obsoletas construya la PATRIA GRANDE querida por JUAN DOMINGO PERON.
Lic. Prof. CARLOS VICTOR ZALAZAR SUAREZ
