Estos cortes se deben a que el sistema obsoleto de la cañería madre, sufre constantes roturas por la presión del agua, el frio –en invierno- y distintos motivos que causa el exceso de años de vida útil de los caños de fibrocemento que datan de principios de la década del 80.
Desde el Consorcio de Agua Potable a cargo del Sr. Manuel Pereyra, se trata de hacer lo humanamente posible para solucionar en la brevedad y evitar estas interrupciones que también afectan a las distintas instituciones del medio.
Tanto desde consorcio como del municipio, fueron innumerables las gestiones que se hicieron para que se reemplazara esa cañería que mide cerca de 3 mil metros, pero hasta el momento desde el gobierno de la provincia no quieren dar ninguna solución.
En este sentido, el intendente Quintar criticó duramente a concejales del FPV, como así también a los distintos funcionarios del gobierno de la provincia en Fiambalá, por no gestionar esta obra que es de mucha necesidad para ellos mismos y para toda la población en general. “Deben pensar menos en las elecciones y votos, y estar más pendiente de lo que necesita la gente, en especial en los servicios básicos”. Dijo.
A primeras horas de este jueves, en algunos barrios recién se está restableciendo el servicio, aunque los sectores más alejados son quienes deben padecer algunas horas más sin el vital líquido que impide hasta la preparación de los alimentos.
En los casos de extrema necesidad, camiones cisterna del municipio llevan agua potable para cada uno de los domicilios e instituciones.
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