La medida Judicial tendría Sentencia N° 5 de fecha del 27 de Febrero del año 2.002, donde la familia Orella, con el patrocinio del Dr. Samuel Aguiar, habían reclamado desde el año 1996, y desde las administraciones de los pasados intendentes, Néstor Cerezo (P.J.), Luis Gómez (FCYS), Hugo Ávila (P.J.) y recae en la actual de Simón Quintar (FCYS).
La heredera Susana Orella, reclamó en nombre de su familia, el avasallamiento que ellos creyeron haber sido víctimas por parte del municipio o de quienes fueron sus administradores, en cuanto a la utilización indebida de sus terrenos, donde se abrieron calles, se colocaron postes de luz, etc; sin el consentimiento de su familia, por lo que buscaron un arreglo económico durante todos estos años, y sintieron como un atropello al que se vieron sumidos todo este tiempo, sin que nadie les diera explicación alguna.
Pero en la mitad de este año, allá por el mes de Junio, Susana Orella con el abogado Aguiar, habrían insistido para encontrar un acercamiento con el municipio administrado por Simón Quintar, y a pesar que en dos oportunidades la Municipalidad fue receptor de sendas Notificaciones de sus demandantes, con el fin de que acudieran al Periodo de Consolidación de Deuda, como legalmente se llama, pero que a su vez, nunca habrían sido contestadas por la Asesoría Legal a cargo del Dr. Pablo Lilljedalh y Fabián Quintar, hijo del propio intendente.
Ahora bien, ¿que pasará con los fondos que recibió el Municipio de Tinogasta sobre Coparticipación, Regalías Mineras y Sojeras? ¿Con que se abonaran los sueldos de los empleados y los compromisos con los diferentes acreedores?
Las cifras son importantes, $ 79.500 aproximadamente, más los gastos que no están sumados en concepto de costas y honorarios, los que podrían acceder a más de $ 100.000.
A menos de 50 días para que deje su mandato, es un duro golpe el que recibe Simón Quintar y un gran dolor de cabeza para Hugo Ávila que asumirá en próximo 10 de diciembre.
Fuente: vocesescritas.com.ar