Según indicaron a Infobae.com fuentes allegadas al gremio, la medida de fuerza fue levantada y el servicio será restablecido. En el entorno de Pablo Moyano dijeron que su principal preocupación era cuidar las fuentes de trabajo de los empleados y que estudiarán las decisiones que el municipio tome en los próximos días.
El conflicto había estallado la semana pasada, cuando el intendente Francisco "Barba" Gutiérrez obtuvo por parte del mismo concejo el aval para poner fin al contrato que Quilmes tenía con la compañía vinculada al clan de Hugo Moyano.
El gremio de Moyano entendió que se trataba de un capítulo más en la disputa que desde hace semanas sostienen la CGT que conduce Moyano y los sindicatos que se oponen a su conducción. Es que el jefe comunal pertenece a la Unión de Obreros Metalúrgicos (UOM), precisamente el sector que busca destronar al líder camionero de la central, para lo cual impulsa la candidatura de Antonio Caló.
Al conocerse la voluntad oficial de no renovar el contrato, Camioneros denunció que 400 empleados ya habían recibido telegramas de despido y se pusieron en pie de guerra. Además del paro de actividades, el gremio amenazó con una medida a nivel nacional, algo que el ministro del Interior, Florencio Randazzo, calificó de “despropósito”.
Hoy el propio Hugo Moyano denunció que “hay una indicación para eliminar todo lo relacionado con Camioneros”. Y aseguró: "Yo no tengo un carajo que ver con Covelia".
En caso de que todo siga según lo previsto por las autoridades, la medida adoptada por el Concejo Deliberante permitirá que el servicio se realice con normalidad hasta noviembre. Para ese mes está prevista una licitación para concesionar el servicio. La otra opción sería municipalizarlo, algo que el intendente vería con buenos ojos y que otros jefes comunales estarían dispuestos a copiar. infobae.com