En todos los casos, la presidencia tuvo el voto del desempate, que en todos los casos, fue positivo para el bloque oficialista.
De esta manera, la Presidencia del Concejo Deliberante recayó en Antonio Camposano, como Vicepresidente primera quedó la Concejal Evangelina Sánchez mientras que el edil Juan Pablo Sánchez ocupa el cargo de Vicepresidente segundo.
El cargo de Secretaria General recayó el Beatríz Flores mientras que el prosecretario será a partir de ahora Roberto Edgar Saracho.
Respecto al cargo de la Secretaría Gral del Concejo, se planteó un fuerte debate ya que el Bloque Justicialista mocionó en el cargo a Beatriz Flores, quien venía ocupando la secretaría desde hace varios años. Para que Flores pudiese asumir nuevamente en el mismo cargo había renunciado días atrás aduciendo problemas personales.
Desde el Bloque del F.C.yS., se rechazó rotundamente la moción de este cargo ya que expresaron que no era reglamentario. En este sentido, la concejal Patricia Villagrán, dijo que llevarían este caso a la justicia a través de la Fiscalía a fin de evitar que Flores nuevamente tome el cargo.
Por su parte la edil Ramona Serra dijo, “En las “famosas” parlamentarias expresaba yo que seguramente se trataba de un ardid propuesto por el Bloque Justicialista. La transparencia la tenemos que demostrar cuando no queremos perpetuarnos en un cargo, por eso el bloque del Frente Cívico y Social no acepta estas artimañas.
Como respuesta, la concejal Evangelina Sánchez también le respondió diciendo, “¡Bienvenida señora concejal a la política! Esto se da siempre en todas las actividades políticas, porque mas allá de ser un acto democrático, la elección de autoridades es un acto político. En todas las legislaturas de la argentina generalmente los cargos políticos como ser la vicepresidencia la presidencia, la prosecretaría y secretaría son para gente de confianza y gente que se cree que van a cubrir las espaldas. No es bajo ningún punto un ardid, sino todas las facultades que la ley prevé.
Hay una máxima que dice que “Todo lo que no está prohibido, está permitido”. La ley nos permite que nosotros podamos renunciar a un cargo sin más razones que razones personales (valga la redundancia). Más allá de eso no me quiero olvidar del derecho constitucional, uno no puede quedarse en una institución ocupando siempre el mismo cargo. Casualmente para eso existen estas posibilidades, en este caso políticas de poder elegir a quien la mayoría considere apto para ese cargo.
Se tiene que tener respeto por las decisiones de la mayoría, creo que es un error judicializar la política porque considero que sabemos perfectamente cuales son los juegos de la política los que estamos en ella”.
