Se trata de diez amas de casa, quienes se ocupan en trabajos de costura, pintura, reciclaje, trabajo en madera y otras actividades. El jefe comunal, enterado de la iniciativa, decidió donarles materiales a fin de impulsar este tipo de prácticas.
Algunas de ellas, María, Teresa y Soledad, comentaron que en un futuro cercano pretenden que esto que hoy les sirve para integrarse, sea un nexo económico, ya que esperan comercializar sus productos.
Otro vecino del lugar explicó que todos en el barrio esperan ansiosos la puesta en funcionamiento del Centro Integrador Comunitario (CIC) en donde van a poder participar de talleres de oficios.