Severo salió de su domicilio en Avellaneda temprano esta mañana, custodiado por personal policial, y se dirigió al Polo Judicial, dependiente del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, ubicado en avenida Mitre al 2600 de esa ciudad bonaerense.
Allí declaró ante el juzgado de garantías número 9, a cargo del juez Luis Silvio Carzoglio, donde relató lo ocurrido durante las 24 horas que estuvo desaparecido.
Por otra parte, en el contacto que matuvo tras su declaración con la prensa, Severo confirmó -tal cual lo expresó el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak-, que nunca solicitó ser incluído en el programa de protección de testigos.
"Es verdad lo que dijo Alak, me negué a estar en el programa porque nunca me gustó esconderme; tengo la verdad y no quiero esconderme y arrastrar a mi familia a esa situación", expresó.
Además, reiteró que durante su cautiverio le dijeron "cosas sobre la Presidenta" y denunció la aparición de nuevos llamados intimidatorios tras su aparición.
"Me dijeron que no me meta más con el ferrocarril, que ahí no voy a volver nunca más. Me decían que era un buchón, un vigilante, que piense en mis hijos", expresó al recordar los detalles que brindó ante la justicia.
"Voy a declarar, que se queden tranquilos, la única forma de que no vaya a declarar es que esté muerto", puntualizó Severo, quien además recordó que durante su cautiverio "estuve con el rostro tapado y maniatado en el interior de una camioneta".
El ex ferroviario indicó que identificó al menos tres voces distintas entre los captores y recordó que escuchó otra frase que hacía referencia a la trascendencia que había cobrado su desaparición a nivel nacional. "Preguntale al gordo qué hacemos, porque se decretó alerta nacional", escuchó decir a a otro de los secuestradores.
La víctima, que además dijo que escuchó tres de las voces de los captores "preocupados por el alerta nacional y la trascendencia" de su desaparición, logró realizar un identikit del único captor que pudo ver, el cual ya investiga la justicia.
Tras su aparición anoche, Severo fue trasladado al hospital Finochietto de Avellaneda, donde recibió el alta médica a las 0.30 luego de ser sometido a una serie de estudios, y aseguró que iba a presentarse a declarar ante el tribunal que lleva adelante el proceso por el crimen del militante del Partido Obrero.
Por su parte, el ministro de Justicia, Julio Alak, destacó este mediodía la importancia de la declaración pública de Severo, quien después de su liberación denunciara que su secuestro "estaba dirigido a la presidenta de la Nación", Cristina Fernández de Kirchner.
Fuente: Télam