Cada arma funcionaba por su cuenta, carecían de preparación y la conducción estuvo plagada de errores, según el Informe Rattenbach.
Con base en el informe, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas condenó a Leopoldo Fortunato Galtieri a 12 años de reclusión con accesoria de destitución, al almirante Jorge Isaac Anaya a 14 años de reclusión con accesoria de destitución, al brigadier Basilio Arturo Lami Dozo a 8 años de reclusión.
En cambio, quedaron absueltos por prescripción de los delitos los jefes militares Osvaldo Jorge García, Helmut Conrado Weber, Juan José Lombardo, Leopoldo Alfredo Suárez del Cerro, Mario Benjamín Menéndez y Omar Edgardo Parada.
Entre los absueltos figuraba el entonces teniente de navío Alfredo Ignacio Astiz, parte de los primeros comandos enviados por el gobierno de Galtieri a las islas Georgias del Sur, vecinas de las Malvinas y también bajo ocupación británica, donde fue detenido y remitido a Gran Bretaña preso.
Astiz fue después juzgado en Argentina y condenado (en ausencia) en Francia por participar de los primeros secuestros y desapariciones de la última dictadura militar (1976-83), entre ellos dos monjas francesas, e infiltrarse entre las Madres de Plaza de Mayo.
En la revisión en segunda instancia civil y federal de la condena a Galtieri y demás responsables militares de la Guerra de Malvinas, en 1988, un tribunal ratificó las condenas por los delitos cometidos unificándolas en 12 años para tres máximos jefes.
(Télam).-