El hecho ocurrió el fin de semana pasado, cuando, debido a los fuertes vientos que se desataron en la villa veraniega, el kiosco ubicado en la calle Liniers, en proximidades de la sede municipal, sufrió la rotura del vidrio frontal del local.
La dueña del establecimiento pidió a la Policía que apostara personal para fortalecer la seguridad en la zona y fue así como, al otro día y tras revisar la cinta de grabación de la cámara de video con la que cuenta el kiosco, descubrió que uno de los efectivos consignados abría una heladera y sacaba bebidas y productos de la góndola.
De acuerdo con las imágenes grabadas, en una segunda entrada al local, se ve al agente cuando se desabrochaba la camisa y sacaba una botella del exhibidor de bebidas y otro artículo de la góndola, mientras que minutos antes había dejado sobre una de las estanterías un cartón, que habría usado para disimular la maniobra.
Las imágenes registradas fueron difundidas en internet por el portal de Villa Carlos Paz "Crónicas del día" y la mujer, finalmente, formalizó una denuncia ante el fiscal de Instrucción de Carlos Paz, Ricardo Mazzuchi, que ordenó la inmediata detención del efectivo.
En forma paralela, según confirmó Quevedo, intervino el Tribunal de Conducta policial, que comenzó a sustanciar una investigación administrativa, en el marco de la cual, además del detenido, otro efectivo, que también había sido designado para custodiar el kiosco, fue "apartado de sus funciones" en forma provisoria.
Este episodio se suma a la crisis que, entre el 3 y el 4 de diciembre pasado, protagonizó la Policía cordobesa, cuyos miembros se acuartelaron en demanda de mejoras salariales, lo que ocasionó que más de un millar de comercios fueran saqueados o robados en la capital cordobesa debido a la falta de seguridad.
Fuente: Télam