A partir de 2003 se restauró el salario mínimo como instituto laboral y, desde 2004 -luego de 11 años de inactividad-, el gobierno convocó al Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil, que retomó su funcionamiento.
Trabajo sostuvo que ese funcionamiento se produjo a través del diálogo social y el consenso entre los actores involucrados y, el objetivo principal, fue establecer un piso salarial para los sectores sociales más desprotegidos, promoviendo condiciones de vida dignas a los trabajadores y a sus familias.
La decisión de elevar el nivel del salario mínimo a 3.600 pesos (un 25,2 por ciento de incremento) implicó que ese umbral salarial se elevara un 1.700 por ciento entre 2002 y 2013.
"En este terreno, como en tantos otros, también puede afirmarse que ésta fue una década ganada", aseguró el informe oficial.
"Desde 2003, se desarrolló una política salarial activa a través de varios instrumentos, como la elevación permanente del valor del salario mínimo. Entre 1993 y 2003, ese instituto se mantuvo inalterado en 200 pesos. Desde entonces se convocó a los actores sociales para conformar el Consejo e incrementar el mínimo y analizar otros aspectos del mercado laboral, como el sostenimiento del empleo, la formación profesional y la productividad", afirmó.
El informe fue elaborado por la subsecretaría de Programación Técnica y Estudios Laborales del Ministerio de Trabajo.
El haber mínimo rige para los asalariados mayores de 18 años que trabajan en el sector privado (excluyendo el agropecuario) y en la administración pública nacional, por lo que suman 9,5 millones, de los cuales el 97 por ciento está en la actividad privada.
Las condiciones determinadas en la negociación colectiva de cada año constituyen un marco de referencia obligado para la definición del aumento del salario mínimo, vital y móvil.
Desde 2004, los incrementos acordados en paritarias fueron parámetros relevantes para la definición de esos nuevos valores, aunque la vinculación entre esas variables se fue modificando.
El 25,2 por ciento de aumento del mínimo superó de forma leve la suba salarial promedio acordada en paritarias este año.
Entre 2007 y 2009, el salario mínimo aumentó de forma similar al incremento promedio de los haberes de convenio y hubo escasas diferencias entre el porcentaje medio acordado en ambos sectores.
En una segunda fase, verificada entre 2010 y 2012, el salario mínimo aumentó menos que el incremento del ingreso de convenio medio, oscilando entre 5 y 6 puntos, mientras que en 2012 la brecha se redujo a dos puntos porcentuales (27 a 25%).
Un aspecto relevante del nuevo valor del mínimo fue que se ubicó por debajo de los salarios de categoría inferior de la mayoría de los convenios más relevantes en cantidad de trabajadores.
Para evaluar la incidencia potencial del mínimo en las remuneraciones de convenio se verifica el haber conformado de convenio, en especial un conjunto de 24 instrumentos sectoriales que cubren el 60 por ciento de los trabajadores convencionados.
El salario conformado de convenio es una construcción que surge de adicionar al salario básico las sumas fijas y los adicionales de carácter general y permanente acordados en paritarias.
A los fines del análisis, se compara el salario conformado de convenio de la categoría inferior, sin computar el adicional por antigüedad, con el mínimo, vital y móvil, explicó el informe.
En la totalidad de los convenios analizados, el salario conformado de convenio de la categoría inicial se ubica por encima de los 4.000 pesos, lo que implica que supera el valor del salario mínimo (3.600 pesos) que regirá desde enero de 2014.
De acuerdo con las estimaciones realizadas, se contabilizan unos 113 mil asalariados registrados del sector privado que perciben remuneraciones similares al mínimo, lo que representa el 1,9 por ciento del total de asalariados formales en empresas privadas.
Si se plantea un escenario de crecimiento del salario promedio del personal registrado del 24 por ciento para el primer trimestre de 2014, el aumento del mínimo a 3.600 pesos resultaría en una relación entre ambos conceptos salariales del 38 por ciento.
Un análisis de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre la tendencia general de los salarios mundiales observó que la relación entre salario mínimo y medio es bastante variable, pero la situación más frecuente es la fijación de un ingreso mínimo que representa un 40 por ciento del haber medio.
Al comparar el nuevo mínimo aprobado con los vigentes en varios países de América Latina, se observa que la Argentina tiene uno de los salarios mínimos más elevados de la región.
Los 3.600 pesos aprobados desde agosto equivalen a 661 dólares, lo que significa que el mínimo de la Argentina es un 69 por ciento más elevado que el de Venezuela (391 dólares), un 74 superior al de Chile (381 dólares) y un 120 mayor al de Brasil (300 dólares).
El salario mínimo argentino casi cuadriplica el valor expresado en dólares que rige en México (143 dólares), concluyó Trabajo.
Fuente: Télam
