Elecciones 2003. Infosic. El Presidente y vicepresidente son elegidos en forma directa por todos los ciudadanos mayores de 18 años, a través de un sistema que prevé que para que una fórmula sea proclamada deba alcanzar porcentajes mínimos fijados por la Constitución nacional o, de lo contrario, ir a una segunda vuelta electoral o ballotage.
Para que un binomio sea electo en el primer turno, deberá obtener más del 45 por ciento de los votos afirmativos válidamente emitidos o, en su defecto, el 40 por ciento de los sufragios y una diferencia mayor de 10 puntos porcentuales sobre la fórmula que le sigue en número de adhesiones.
Ayer no sucedió esto y los porcentajes finales luego del escrutinio fueron; Menem 24,3% de los sufragios, Nestor Kirchner 21,9%. En este caso ninguna fórmula alcanzó esas mayorías y diferencias, entonces se realizará una segunda vuelta dentro de los 30 días siguientes, según establecen el Código Electoral y la Constitución Nacional.
En estas elecciones, la primera vuelta fué el 27 de abril y la segunda el 18 de mayo, mientras que el binomio electo asumirá en sus funciones el 25 de mayo, según dispuso por decreto el actual mandatario, Eduardo Duhalde.
El Código Electoral fija entre los artículos 151 y 155 el mecanismo a seguir en caso de un ballotage y explica que sólo participarán de la segunda vuelta las dos fórmulas que resultaron más votadas en la primera.
Dentro de los cinco días posteriores a la elección, ambos binomios deberán ratificar por escrito ante la Junta Electoral Nacional de la Capital Federal su decisión de presentarse al segundo turno y si uno de ellos no lo hiciera, será proclamada el otro.
Lo mismo ocurrirá si una de las fórmulas renuncia a participar de la segunda vuelta por considerar que el resultado no variará u otro motivo.
El día fijado para el ballotage, los ciudadanos sólo podrán optar entre las dos fórmulas más votadas en la primera vuelta y el binomio que más adhesiones consiga, resultará el ganador, cualquiera sean los porcentajes.
En el último siglo, todos los presidentes resultaron electos en primera vuelta y sólo en las elecciones del 11 de marzo de 1973, ninguna fórmula alcanzó el 50 por ciento de los votos, el porcentaje mínimo que fijaba por entonces la Constitución Nacional.
{adr}La fórmula Héctor Cámpora-Vicente Solano Lima, del Frente Justicialista de Liberación Nacional (Frejuli), obtuvo el 49,59 por ciento y la de Ricardo Balbín-Eduardo Gamond, de la UCR, alrededor del 21 por ciento.
Pese a que el resultado obligaba a realizar una ballotage, los radicales consideraron que, dada la diferencia, no tenía sentido y renunciaron a presentarse en el segundo turno, por lo que Cámpora asumió el 25 de mayo, la misma fecha en que lo hará el reemplazante de Duhalde.
Otro antecedente más cercano es el de las elecciones de Capital Federal de mayo de 2000, cuando Aníbal Ibarra (Alianza UCR-Frepaso) se impuso a Domingo Cavallo (Acción por la República), pero no superó el mínimo que exige la legislación porteña: un piso del 50 por ciento de los sufragios.
En esa elección, Ibarra logró el 49,41 por ciento de los votos contra el 33,08 que consiguió el ex superministro menemista.
Sin embargo, el ex ministro de Economía, al igual que Balbín, renunció al segundo turno al creer que el resultado era irreversible.
