La iniciativa fue impulsada por los senadores Rafael Castillo y Pedro Vega. Dispone que se entiende por artesano tradicional a quien transforma la materia prima noble con tecnología básica en alimentos, objetos utilitarios, decorativos u ornamentales.
La pensiòn será otorgada a los artesanos tradicionales que hayan cumplido los 60 años de edad y 30 años de labor contínua, sean nativos y residentes en la provincia o que acrediten como mínimo 30 años de domicilio y residencia en la provincia.
Será autoridad de aplicación una comisión integrada por dos representantes de Diputados, dos de Senadores, uno del Poder Ejecutivo y uno de la UNCA, vinculado con el programa Recupero de la memoria