Los tres hechos están plenamente comprobados y sólo falta documentar la participación del entonces mandatario, algo para lo cual, según el fiscal del caso, José Peláez Bardales, hay pruebas determinantes, reportó la agencia noticiosa alemana DPA.
Fujimori, de 71 años y preso desde septiembre de 2007, comenzará a enfrentar el nuevo juicio cuando aún están por resolverse las apelaciones que presentó contra la sentencia que se le dictó en un proceso anterior.
Entonces se le impusieron en primera instancia 25 años de prisión por 25 asesinatos y dos secuestros, y siete años y medio por el pago de una indemnización irregular a su entonces asesor Vladimiro Montesinos.
En Perú las penas no son acumulables, por lo que Fujimori sólo cumplirá la mayor que se le imponga.
El ex presidente ya tiene una condena firme a seis años de cárcel por el allanamiento ilegal a un departamento de Montesinos en 2000.
Los casos por los que el ex mandatario responderá desde mañana fueron condensados en un solo juicio para agilizar el proceso judicial.
Hasta hoy se desconocía qué estrategia adoptará el abogado defesor, César Nakazaki, quien se limitó a afirmar que los magistrados están parcializados y que no tiene esperanzas.
Fujimori responderá por la formación de una red de espionaje de la cual se comprobó que interceptaba las conversaciones telefónicas de al menos 28 personas, aunque se estima que el número de víctimas, entre políticos, periodistas y otros, era considerablemente mayor.
"Hay 60 testigos, así como videos, audios y documentos que acreditan la responsabilidad del ex mandatario", aseguró el fiscal Peláez Bardales, quien agregó que el montaje de la red implicó el desvío de fondos mediante un plan denominado "Emilio".
El segundo caso, también respaldado por audios, videos, documentos y recibos, se refiere a la "compra" de al menos 13 legisladores que, tras ser elegidos en 2000 por partidos de oposición, se pasaron al oficialismo a cambio de prebendas.
El tercero se refiere a la compra secreta por parte del Estado del canal de televisión por cable CCN, por el que se pagaron 2,8 millones de dólares, así como a la "compra" de la línea editorial del diario Expreso, por entonces uno de los principales del país.
Con esos casos terminarán de procesarse aquellos por los que Chile concedió la extradición de Fujimori en 2007.
Aunque el ex presidente también es sospechado en varios episodios más de derechos humanos y corrupción, para procesarlo por ellos se requerirá el consentimiento de Chile.
Como en los juicios anteriores, las audiencias se desarrollarán bajo la presidencia del juez César San Martín, en el auditorio del cuartel de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales de la Policía, donde también está la celda de Fujimori, en el distrito limeño Ate Vitarte.
Se ignora cuánto tiempo puede durar el nuevo juicio, pues eso dependerá de la estrategia de la defensa. Si el ex mandatario no acepta su responsabilidad, como ocurrió en el caso de la indemnización, podría ser un proceso largo.
La Fiscalía aspira a contar con unos 150 testigos, entre ellos Montesinos y la ex esposa del acusado, Susana Higuchi.
Fujimori, que en 1992 dio un autogolpe de estado e instaló un gobierno autoritario, es el primer ex mandatario peruano apresado y condenado tras ser elegido originalmente en forma democrática.
Fuente: Telam