Hace muy pocos días señalábamos que el acto electoral interno del radicalismo, había sido un lamentable bochorno y que la Junta Electoral debía proceder a anular todas las mesas impugnadas con pruebas concretas.
El viernes próximo pasado por la noche la Junta, actuando con seriedad, juicio y responsabilidad, dio a conocer su resolución final, anulando la totalidad del comicio en Formosa y sugiriendo al Comité Nacional la realización de elecciones complementarias en dicha provincia (Art. 15 de la Carta Orgánica Nacional). Con respecto a las provincias de Santiago del Estero se resolvió anular 16 mesas y, en la de Salta 8 mesas, no considerándose necesario la convocatoria a complementarias. Se desestimaron asimismo las impugnaciones en las provincias de San Juan y Santa Fe.
Esta decisión fue tomada basándose en las actas, denuncias e informes por escrito y de ninguna manera por afirmaciones escandalosas que aparecieron en los medios masivos de comunicación. Si bien seguimos los radicales afectados por el bochorno, podemos afirmar que los hechos fueron de mucha menor gravedad que lo anunciado en los primeros momentos.
Ahora bien, cualquiera sea el resultado final y la fórmula triunfadora, es preciso con toda urgencia ordenar el partido. El presidente del Comité Nacional debe retomar su cargo, ya que nadie pone en tela de juicio la corrección y transparencia del acto electoral del Chaco y como consecuencia de ello, el Vicepresidente 1º y el Secretario de Relaciones Institucionales, también deben reincorporarse para seguir cumpliendo sus tareas, con el fervor y el patriotismo con que lo venían haciendo.
Debemos entre todos superar este traspié, que de ninguna manera es la caída y retomar la marcha con fe y esperanza, en busca de un resultado digno que satisfaga nuestras máximas aspiraciones.
