Al respecto, recordó a los empresarios vitivinícolas que “no se van a perder cosechadores esta temporada porque no se pierde la asignación universal por un trabajo que es eventual”.
“De mayo de 2003 en la Argentina está en marcha un proyecto de país que no deja a nadie olvidado”, dijo Jaque ante la Presidenta y empresarios vitivinícolas.
Durante el desayuno de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) el gobernador mencionó -como próximo desafío- “una segunda gran reconversión de la actividad vitivinícola en Mendoza para que las 58.000 hectáreas con uva comunes -de los pequeños productores- puedan transformarse en producción de uvas de mayor calidad, para vino o para mosto, y no tengan la dificultad de no tener la rentabilidad que esperan”.
Jaque enumeró todo lo realizado en el último año como “la inauguración de una oficina en Shangai, tareas contra las plagas fitosanitarias que permitan llegar con la uva en fresco de calidad a todos los mercados, la colocación de mallas antigranizo, y garantizar el pago mínimo a los productores para que puedan tener rentabilidad mínima a 0,80 centavos el kilo más 0,12 de subsidio para que reciban 0.92 centavos por kilo”.
“Tanto esfuerzo ha valido la pena y, en lo personal, me siento orgulloso de acompañar a un proyecto y modelo del país donde los resultados están a la vista”, dijo Jaque dirigiéndose a Cristina.
Minutos antes, el gobernador mendocino ditinguió como "huésped de honor" de la provincia a la Presidenta, mientras que el titular de COVIAR, José Molina, elogió la decisión presidencial de declarar al vino como bebida nacional.
La mandataria es la figura central de los festejos vendimiales que se iniciaron ayer en el hotel Hyatt, con la presencia de empresarios, bodegueros, políticos y cuatro gobernadores: Celso Jaque, José Luis Gioja (San Juan), Luis Beder Herrera (La Rioja) y Daniel Scioli (Buenos Aires). (Telam)