“Cuando era joven, a los 15 años salí a la plaza principal a pedir por la minería. Hubo un gobernador que renunció porque una empresa minera se iba a ir a Tucumán. Catamarca tiene historia en el tema y resulta que ahora un grupo de gente, que no son catamarqueños, quiere empañar todo. Ellos pueden tener sus ideas y yo los respeto. La minería como política de Estado puede discutirse -porque nadie tiene la razón absoluta-, pero no nos podemos cerrar en una postura. Un porteño o un español no pueden venir acá a no dejar hablar a la gente; así no se forja el diálogo ni el debate”, cuestionó Brizuela.
A su vez, dijo que en la próxima gestión hará “mucho hincapié” en todo lo referido al turismo, agua y energía, más allá de otros ejes. “Ya hicimos un avance importante y esto se va a multiplicar varias veces en los próximos cuatro años”, auspició.