"A principios de siglo, cuando se construye el telégrafo para unir las comunidades del oeste y el centro catamarqueño (llegaba hasta Corral Quemado-Belén), se realizó una huella para poder transitar con carro, que permitía la construcción y el mantenimiento del mismo; a partir de allá en la cartografía realizada por el Instituto Geográfico Militar figura como huella nacional el camino que une ambas localidades", historió el legislador.
A renglón seguido, trajo a colación que en 1980, el párroco de Pomán, presbítero Adolfo Nieva, expresaba en una nota enviada al obispo que el pueblo de Pomán pide reparación histórica, no aspira a que se le devuelva ciertos privilegios de lo que fuera despojado, ni de sedes, ni de capitales, sino algo que aspira desde hace muchos años: reabrir el histórico camino Pomán-Concepción".
"Nieva -recordó Gaffet-, en esa misiva sostenía que este camino, Pomán-Concepción también es histórico porque los colonizadores lo transitaron, y tal vez los mismos que poblaron estas tierras".
El diputado, alineado en las huestes que conduce el actual gobernador Eduardo Brizuela del Moral, dijo que se presentaron notas y anteproyectos del mencionado camino dando origen a notas periodísticas. En el mismo, se realiza una traza tentativa con la descripción de lugares, parajes y nombres de puestos serranos, tomándose mediciones longitudinales, dando el trazado desde Pomán hasta Concepción de 32 kilómetros aproximadamente; desde Concepción hasta Huillapima de 17 kilómetros, y desde esta localidad hasta la ciudad Capital, 33 kilómetros".
{adr}"Es decir -acotó- que la distancia sería de 82 kilómetros. Actualmente, por la Cuesta de la Cébila es de 160 kilómetros, con lo que estamos reduciendo 80 kilómetros, o sea la mitad de su totalidad".
Interpreta que "esta reducción se ve traducida en un importante ahorro en costos de transporte, lo que generaría un mayor desarrollo productivo, económico y turístico para el departamento Pomán, como también para todos los departamentos vecinos del oeste catamarqueño".
Especificó que "actualmente, en las faldas del cordón montañoso del Ambato, hay trece puestos serranos donde sus habitantes viven de la agricultura y ganadería y no tienen la posibilidad de recibir tecnología y recursos mínimos para un mayor desarrollo local de sus producciones, como así la falta de un servicio de asistencia social de salud".
Los referidos puestos son Punta de Agua, Los Corrales, El Espinillo, El Simbolar, Las Piedras Paradas, Huayco Hondo, Los Lampacitos, Los Ciénagos, La Cieneguita, La Calera, Mermudez, La Cañada y Trampa Churano.