En la misma instancia se encuentran los municipales de Capayán, quienes a pesar de todo mantienen la movilización por las calles de la localidad.
Por otro lado, los trabajadores nucleados en ATE Huillapima siguen de paro y hasta el momento no ha habido diálogo con el ejecutivo de la comuna.
Por último, en Andalgalá los trabajdores están decidiendo en asamblea si continuarán con medidas y cuáles seran las modalidades en que seguirá la protesta.
Los conflictos en los municipios se agravaron luego del aumento del 15% otorgado por el gobierno de la provincia, pero que los intendentes manifestaron no poder asumirlos, además de la crítica situación financiera en todos las comunas, que han perjudicado el normal desarrollo de los distintos pagos, aguinaldos, canasta familiar, becas y todas las formas de contratación que han precarizado la situación laboral de los municipales.