Cristina Kirchner saludó a los manifestantes que la aguardaban en la Plaza de Mayo, y en un breve discurso subrayó la importancia de la militancia juvenil y de los trabajadores, que "fueron la vanguardia del Gobierno en los momentos más difíciles". Hizo además un llamado "a dar vuelta la página de la historia de los enfrentamientos y las confrontaciones".
La jefe de Estado se asomó a las 19.06 al escenario montado entre la Casa Rosada y la Plaza de Mayo, y permaneció allí por espacio de 30 minutos, lapso en el cual se permitió entonar las estrofas del Himno Nacional con el músico Charly García, a quien saludó en dos oportunidades.
"Yo nací políticamente con la misma edad que muchos ustedes tenían, en momentos muy difíciles en los que levantábamos la mano para oponernos a la dictadura. Este maravilloso país tiene la inmensa suerte de que, a diferencia de otras épocas pasadas y lo que pasa en otros países, los jóvenes se convocan a la plaza para festejar con alegría", sostuvo la mandataria.
"Agradezco también a los trabajadores, que luchan por un país más justo, libre e igualitario. No soy una presidente de escritorio, recorro las fábricas todos los días y se que muchos de los jóvenes que están en esta plaza consiguieron su primer trabajo con este gobierno", indicó Cristina Kirchner. Además aseguró que "antes mucha gente estaba en la plaza porque la traían", pero ahora "está claro que cada uno de ustedes vino por propia voluntad y eso tiene un gran valor político".
Un momento de emoción para la jefe de Estado fue generado por los militantes que, con cánticos, evocaron a su esposo y antecesor, Néstor Kirchner. Entonces, la mandataria afirmó que "él" vive "en cada uno de los que han vuelto a creer en la construcción colectiva de una Argentina".
"Él vive en los jóvenes, en los trabajadores, en las mujeres, en los estudiantes, los docentes, los científicos que han vuelto", subrayó.
Antes de retirarse, la Presidenta entonó la canción de Los Caballeros de la Quema "Avanti morocha", bailó, se abrazó con su hija Florencia, sonrió con su otro heredero, Máximo, y agradeció a los presentes por "el aguante de siempre".
Fuente: infobae.com